lunes, 14 de diciembre de 2020

Tres tipos de líderes de Culto según Rachel Bernstein

La reciente serie documental de HBO, "The Vow", examina cómo el líder del culto NXIVM, Keith Raniere, pudo vender primero cursos de superación personal basándose en un esquema de marketing multinivel, para luego abusar psicológica y sexualmente de sus seguidores, especialmente mujeres. Raniere, que fue condenado recientemente a 120 años de prisión por sus delitos, convenció durante décadas a cientos de personas en base a sus enseñanzas y su personalidad carismática. Según Rachel Bernstein, terapeuta con sede en California que trabaja con ex miembros de cultos, incluidos algunos de NXIVM, hay tres tipos principales de líderes de culto que llegan a la cima. Algunos son narcisistas egocéntricos, mientras que otros tienen delirios que creen tan profundamente que también pueden lograr que otros se unan

El mártir delirante

 Para Bernstein, este primer tipo es el más peligroso dado que pueden usar sus creencias inquebrantables para convencer a otros de que compren el engaño. El ejemplo resonante más ilustrativo es el caso de Heaven's Gate en San Diego, un culto donde 39 miembros se quitaron la vida siguiendo las instrucciones del líder Marshall Applewhite, en 1997. Applewhite estaba convencido de que un ovni viajaba adherido a la cola del cometa Hale Boop, señal que los miembros del grupo esperaban para abandonar sus "recipientes corporales" y avanzar hacia una existencia superior. Según Bernstein, “existe la sensación de que el líder no estaba tratando de sacarles dinero y no estaba tratando de usarlos. Realmente creía que esta nave nodriza estaba llegando y que todos necesitaban dejar su existencia corporal e ir a esta nave nodriza. Gradualmente todos se unieron a la psicosis ”. Este delirio grupal es una condición diagnosticable llamada "trastorno psicótico compartido", según la nosografía psiquiátrica. En el caso puntual citado, la variante se denomina "folie à plusieurs", y suele requerir como condición diagnóstica que las personas afectadas vivan próximas, estén socialmente o físicamente aisladas, y tengan poca interacción con el mundo exterior. Exactamente lo que ocurrió en el caso "Puertas del Cielo". 

El predicador devenido ególatra 

Bernstein sugiere que otros líderes de culto no se dan cuenta de su potencial carismático al principio, pero una vez que lo hacen, se vuelven ególatras. Este líder de culto puede comenzar como maestro, predicador callejero o en otra posición influyente desde la cual hablar en público. Con el tiempo, se dan cuenta de que la gente se aferra a lo que tienen para decir y comienzan a sacar ventaja de esa habilidad. En palabras de la especialista, “de repente se dan cuenta de que todos escuchan todo lo que dicen, advierten que son flautistas, y reconocen que la gente hará las cosas sélo porque les dijeron que lo hicieran. Así, comienzan a transformarse en una especie de monstruo egocéntrico”. Sin duda alguna, el caso más paradigmático de este segundo tipo es el de Jim Jones, líder del "Templo del Pueblo", que orquestó la masacre de Jonestown en 1978. 

El narcisista estricto 

Por último, está el líder de culto cuya personalidad es de base narcicista. “Así son desde pequeños. En última instancia, se sienten con derecho a mentir por completo, a mostrar un rostro encantador, a hacer creer lo que están vendiendo, sea lo que sea, ya sea Dios o un producto o cualquier otra cosa". Según Bernstein, la mayoría de los líderes de culto son narcisistas y remiten a un "pozo sin fondo de necesidad del ego". Este tipo de personalidad podría explicar por qué alguien como Raniere estableció su culto de la manera en que lo hizo, con dinámicas de chantaje vincular sólidamente arraigadas en la vida grupal, a la par que una obediencia estricta a su persona y a su sistema de creencias. Incluso si un miembro de NXIVM había dedicado una década de su vida al grupo, un error lo podía etiquetar como poco confiable o un fracaso para la comunidad. En opinión de Bernstein, esa creencia crea una "rueda de hámster" de comportamientos y relaciones poco saludables. “Yo diría que la mayoría de los líderes de cultos son narcisistas malignos. No les importa el daño que están causando. A ellos no les importan las mentiras que están diciendo y no les importan las familias que están destruyendo. Solo necesitan ser necesitados, y necesitan ser amados, necesitan ser adorados, necesitan ser temidos". 


📖🖊 Agradecemos a Rachel Bernstein, LMFT autorizarnos a compartir una traducción adaptada de la entrevista publicada originalmente en el magazine Insider por la periodista Julia Naftulin (insider.com). Rachel es también autora de una interesante serie de podcast que puede encontrarse en IndoctriNation Podcast with Rachel Bernstein.