sábado, 24 de junio de 2017

Fundamentalismo y cerebro: un estudio

Fuente: Diario Uno//Científicos de la Universidad Northwestern de Illinois (EE.UU.) aseguran haber descubierto una conexión entre las lesiones cerebrales y la falta de voluntad de una persona a la hora de aceptar nuevas ideas, vínculo que, según los investigadores, hace que algunas personas sean más extremistas en sus creencias religiosas.

Jordan Grafman, neuróloga principal del estudio, publicado en la revista 'Neuropsychologia', indica que la "flexibilidad" religiosa depende de la salud del área del cerebro responsable de "mantener la mente abierta".

El equipo de Grafman llevó a cabo pruebas en 119 veteranos estadounidenses de la Guerra de Vietnam que habían sufrido lesiones cerebrales penetrantes y en 30 veteranos sin antecedentes de traumatismo craneal.

En su estudio los científicos utilizaron tomografías computarizadas para detectar en los participantes lesiones del área cerebral conocida como corteza prefrontal ventromedial. Se cree que esta área desempeña un papel cognitivo en el pensamiento crítico, en la resolución de problemas, la planificación y las experiencias espirituales.

Tras analizar los resultados, los investigadores establecieron un vínculo entre las lesiones en estas áreas del cerebro y la fuerza de las convicciones religiosas, llegando a la conclusión de que los veteranos que presentaban este tipo de lesiones mostraban niveles más altos de fundamentalismo religioso, en comparación con aquellos sin lesiones.

Sin embargo, Grafman advierte en el portal PsyPost de las limitaciones del estudio, ya que todos los participantes del experimento eran "hombres veteranos de origen estadounidenses". Esto, según el neurólogo, impide extender las conclusiones a otros grupos demográficos, incluidas las mujeres, las personas de otros países o las que provienen de culturas con diferentes creencias religiosas.

sábado, 17 de junio de 2017

Los grupos sectarios como grupos estereotipados

"David Koresh", por Robert Preston

Por Juan Manuel Otero Barrigón // Desde el punto de vista de la psicología de los grupos, y mas puntualmente, desde el campo de la psicología social argentina tal cual fuera formulada por el Dr Enrique Pichón Riviere (1907-1977), podemos entender a los grupos de características sectarias en tanto grupos estereotipados, en el marco de una concepción de enfermedad grupal que refiere al miedo al cambio, y por ende, a una adaptación pasiva a la realidad que niega toda posibilidad de crecimiento y desarrollo creativo.  Básicamente, puede entenderse como estereotipia a la perdida de interrelación dialéctica con el medio, lo que conduce a un centramiento en la lógica del propio grupo, y por lo tanto, a la clausura, rasgo característico de este tipo de agrupaciones. Los grupos que se clausuran, que se cierran en sí mismos, suelen a su vez caer en la llamada lógica delirante, donde el encierro exacerba de manera progresiva los propios posicionamientos y actitudes, perdiendo como referentes las problemáticas del medio en el cual el grupo se haya inserto, y quedando de este modo a merced de una lógica de repetición estéril.  Sucesos como los ocurridos en Guyana en 1978, donde 914 miembros de la secta religiosa Templo del Pueblo protagonizaron un suicidio colectivo, o como el acontecido en Waco, en 1993, cuando se enfrentaron agentes federales y seguidores del ‘mesíasDavid Koresh, nos pueden servir de ejemplo para ilustrar, en términos extremos, las consecuencias posibles de vislumbrar cuando distintos grupos, ya sean sus fines religiosos, espirituales, políticos o  culturales , se cierran en sí mismos, perdiendo toda posibilidad de apertura, y por ende, de praxis transformante de la realidad.

sábado, 10 de junio de 2017

sábado, 3 de junio de 2017

Documental: Los Niños de Dios


Recomendado documental sobre la historia, prácticas y doctrinas de "The Children of God" (Los Niños de Dios), un icónico grupo sectario nacido en la California de los años 60´ de la mano del pastor David Brandt Berg, y que fuera objeto de numerosas denuncias, tanto en América como en Europa, como consecuencia de su prédica antisistema y fundamentalmente, de su peculiar reinterpretación del mandato bíblico del "amor".